Posted: Saturday 13/01/2007 16:31
A veure si tindrem Carmel a El Prat
De LV:
Aparecen fisuras en al menos catorce inmuebles de El Prat frente a las obras del Ferrocarril
13/01/2007 | Actualizada a las 03:31h | El Prat de Llobregat
Raúl Montilla | Puertas y ventanas que ya no encajan, grietas que atraviesan viviendas por completo y algunas que han hecho saltar, incluso, baldosas de los cuartos de baños. Una situación que, sumada a unas obras de grandes dimensiones como son las del tren de alta velocidad, ha disparado las alarmas en un grupo de viviendas del núcleo antiguo de El Prat. Todo esto ocurre a tan sólo quince metros de donde, todavía actualmente, las excavadoras remueven tierra. Ya se han detectado grietas en una catorcena de viviendas. La preocupación entre los vecinos resulta más que evidente. Se palpa en el ambiente.
"Desde Adif nos dicen que no hay causa y efecto. Que las grietas no tienen nada que ver con las obras del AVE. ¿Entonces por qué han aparecido las grietas ahora?", pregunta Rosario Amador, presidenta de la Asociación de Vecinos del Nucli Antic de El Prat. Las principales grietas en viviendas que denuncian desde la entidad vecinal se han detectado en las calles Manuel Bertrand, Enric Borràs, Joan Maragall y Ferrocarril, en un total de catorce pisos y locales. La mayoría se distingue sin excesiva dificultad desde la calle. Según explican, prácticamente todas las detectadas comenzaron a aparecer durante el pasado mes de diciembre. Antes no estaban. Y el problema y lo que más les preocupa es que cada día aparecen nuevas, según los vecinos, o crecen las ya existentes.
En la calle Ferrocarril, paralela a las vías del tren, se aprecia una grieta a lo largo de más de una decena de metros en medio de la calzada. Las aceras están movidas y deformadas. En la calle Manuel Bertrand, además de las que se detectan en el interior de diversos pisos, dos bloques de viviendas - uno de menos de diez años- ya se encuentran separados entre ellos por más de tres centímetros. La luz entra entre las dos juntas de dilatación de ambos edificios. Hay grietas que atraviesan naves en la calle Enric Borràs, y otras, también bien visibles, en la calle Joan Maragall. Los vecinos insisten: no estaban antes de las obras del AVE. No existían el pasado mes de noviembre.
"Puede haber habido un corrimiento de tierras o algo similar. Esto es terreno deltaico, hay agua. ¿Y si se ha movido algo? La mayoría de las grietas van paralelas a las vías y al túnel que se ha hecho", manifiesta Rosario. "Hay muros que se han abierto por completo. La gente está muy nerviosa", añade.
Las obras causantes de las grietas, o las supuestas culpables, según los vecinos, son las de un túnel que se encuentra a una quincena de metros de las viviendas afectadas. Es por el que, en el próximo abril han de comenzar a circular los trenes de cercanías de Renfe, que ahora circulan en superficie, más al sur, a unos diez metros de distancia. El sistema que se ha llevado a cabo para su construcción es el más habitual en estos casos. Se levantaron paredes de hormigón y se cubrió. Luego las excavadoras y los camiones se encargaron de sacar la tierra. En diciembre, cuando todavía se estaba sacando tierra de su interior, comenzaron a aparecer las grietas.
Los vecinos se muestran preocupados y lo están todavía más por las obras que sucederán a ésta. Una vez entre en funcionamiento ese túnel, en mayo, se comenzará la construcción del otro. Justo por donde todavía hoy pasan las vías del tren. Se abrirá camino en el subsuelo para el AVE y los trenes de largo recorrido. Este nuevo túnel quedará a tres metros de donde se encuentran las calles en los que ya se ha detectado problemas de grietas. Tienen la convicción de que, si se hace esa obra, El Prat puede vivir un nuevo Carmel. "Si ya tenemos problemas, cuando se haga esa obra puede ser terrible", señala Rosario.
Tanto el Ayuntamiento de El Prat como Adif, el ente empresarial de Fomento responsable de las obras, han abierto ya una investigación sobre las posibles causas de las grietas. Desde este último organismo todavía no descartan nada, aunque quitan importancia a que los problemas que se han detectado puedan ser derivados de las obras que están a una quincena de metros de las viviendas. "Los problemas en las viviendas se han detectado en el lado mar y nosotros estamos trabajando en el lado montaña. Hay alrededor de quince metros de distancia y unas vías de tren por en medio. Pero igualmente ya estamos investigando el caso", explicó ayer una portavoz de Adif.
El Ayuntamiento de El Prat hace un llamamiento a la calma. "Estamos elaborando un informe que enviaremos a Adif. Tenemos 14 casos, de vecinos que se han puesto en contacto con nosotros. Pero no se trata de una situación preocupante. Hay casos en que las grietas parece que son viejas. Pero todo se ha de investigar. Comprendo que los vecinos puedan estar preocupados, pero no hemos detectado ninguna grieta grave que afecte, por ejemplo, a una pared maestra. Es más una situación molesta que peligrosa", explicó ayer a La Vanguardia Xavier Macarro, ingeniero técnico de Obras Públicas del Consistorio.
Por su parte, el teniente de alcalde de Urbanismo de El Prat, Sergi Alegre, aseguró que hasta ahora Adif ha actuado en consecuencia frente a todas las dudas o problemas aparecidos y que se cuenta con tiempo suficiente para asegurar que las obras del nuevo túnel no tendrán ninguna afectación sobre los vecinos que pueda resultar peligrosa pare ellos o sus viviendas.
"Los vecinos tienen toda la compresión del Ayuntamiento. Nosotros estamos analizando con suma atención todas las peticiones que nos han solicitado. Y antes de que comiencen las nuevas obras, aseguraremos que éstas se puedan realizar con todas las garantías que requiere el caso. Si es necesario, exigiremos a Adif que realice nuevos estudios. Hasta ahora ha actuado siempre en lo que se le ha pedido. Cuando se ha detectado una grieta han respondido inmediatamente. No estamos en una situación de peligro y no se va a hacer nada que pueda resultar peligroso", insistió Alegre.
De LV:
Aparecen fisuras en al menos catorce inmuebles de El Prat frente a las obras del Ferrocarril
13/01/2007 | Actualizada a las 03:31h | El Prat de Llobregat
Raúl Montilla | Puertas y ventanas que ya no encajan, grietas que atraviesan viviendas por completo y algunas que han hecho saltar, incluso, baldosas de los cuartos de baños. Una situación que, sumada a unas obras de grandes dimensiones como son las del tren de alta velocidad, ha disparado las alarmas en un grupo de viviendas del núcleo antiguo de El Prat. Todo esto ocurre a tan sólo quince metros de donde, todavía actualmente, las excavadoras remueven tierra. Ya se han detectado grietas en una catorcena de viviendas. La preocupación entre los vecinos resulta más que evidente. Se palpa en el ambiente.
"Desde Adif nos dicen que no hay causa y efecto. Que las grietas no tienen nada que ver con las obras del AVE. ¿Entonces por qué han aparecido las grietas ahora?", pregunta Rosario Amador, presidenta de la Asociación de Vecinos del Nucli Antic de El Prat. Las principales grietas en viviendas que denuncian desde la entidad vecinal se han detectado en las calles Manuel Bertrand, Enric Borràs, Joan Maragall y Ferrocarril, en un total de catorce pisos y locales. La mayoría se distingue sin excesiva dificultad desde la calle. Según explican, prácticamente todas las detectadas comenzaron a aparecer durante el pasado mes de diciembre. Antes no estaban. Y el problema y lo que más les preocupa es que cada día aparecen nuevas, según los vecinos, o crecen las ya existentes.
En la calle Ferrocarril, paralela a las vías del tren, se aprecia una grieta a lo largo de más de una decena de metros en medio de la calzada. Las aceras están movidas y deformadas. En la calle Manuel Bertrand, además de las que se detectan en el interior de diversos pisos, dos bloques de viviendas - uno de menos de diez años- ya se encuentran separados entre ellos por más de tres centímetros. La luz entra entre las dos juntas de dilatación de ambos edificios. Hay grietas que atraviesan naves en la calle Enric Borràs, y otras, también bien visibles, en la calle Joan Maragall. Los vecinos insisten: no estaban antes de las obras del AVE. No existían el pasado mes de noviembre.
"Puede haber habido un corrimiento de tierras o algo similar. Esto es terreno deltaico, hay agua. ¿Y si se ha movido algo? La mayoría de las grietas van paralelas a las vías y al túnel que se ha hecho", manifiesta Rosario. "Hay muros que se han abierto por completo. La gente está muy nerviosa", añade.
Las obras causantes de las grietas, o las supuestas culpables, según los vecinos, son las de un túnel que se encuentra a una quincena de metros de las viviendas afectadas. Es por el que, en el próximo abril han de comenzar a circular los trenes de cercanías de Renfe, que ahora circulan en superficie, más al sur, a unos diez metros de distancia. El sistema que se ha llevado a cabo para su construcción es el más habitual en estos casos. Se levantaron paredes de hormigón y se cubrió. Luego las excavadoras y los camiones se encargaron de sacar la tierra. En diciembre, cuando todavía se estaba sacando tierra de su interior, comenzaron a aparecer las grietas.
Los vecinos se muestran preocupados y lo están todavía más por las obras que sucederán a ésta. Una vez entre en funcionamiento ese túnel, en mayo, se comenzará la construcción del otro. Justo por donde todavía hoy pasan las vías del tren. Se abrirá camino en el subsuelo para el AVE y los trenes de largo recorrido. Este nuevo túnel quedará a tres metros de donde se encuentran las calles en los que ya se ha detectado problemas de grietas. Tienen la convicción de que, si se hace esa obra, El Prat puede vivir un nuevo Carmel. "Si ya tenemos problemas, cuando se haga esa obra puede ser terrible", señala Rosario.
Tanto el Ayuntamiento de El Prat como Adif, el ente empresarial de Fomento responsable de las obras, han abierto ya una investigación sobre las posibles causas de las grietas. Desde este último organismo todavía no descartan nada, aunque quitan importancia a que los problemas que se han detectado puedan ser derivados de las obras que están a una quincena de metros de las viviendas. "Los problemas en las viviendas se han detectado en el lado mar y nosotros estamos trabajando en el lado montaña. Hay alrededor de quince metros de distancia y unas vías de tren por en medio. Pero igualmente ya estamos investigando el caso", explicó ayer una portavoz de Adif.
El Ayuntamiento de El Prat hace un llamamiento a la calma. "Estamos elaborando un informe que enviaremos a Adif. Tenemos 14 casos, de vecinos que se han puesto en contacto con nosotros. Pero no se trata de una situación preocupante. Hay casos en que las grietas parece que son viejas. Pero todo se ha de investigar. Comprendo que los vecinos puedan estar preocupados, pero no hemos detectado ninguna grieta grave que afecte, por ejemplo, a una pared maestra. Es más una situación molesta que peligrosa", explicó ayer a La Vanguardia Xavier Macarro, ingeniero técnico de Obras Públicas del Consistorio.
Por su parte, el teniente de alcalde de Urbanismo de El Prat, Sergi Alegre, aseguró que hasta ahora Adif ha actuado en consecuencia frente a todas las dudas o problemas aparecidos y que se cuenta con tiempo suficiente para asegurar que las obras del nuevo túnel no tendrán ninguna afectación sobre los vecinos que pueda resultar peligrosa pare ellos o sus viviendas.
"Los vecinos tienen toda la compresión del Ayuntamiento. Nosotros estamos analizando con suma atención todas las peticiones que nos han solicitado. Y antes de que comiencen las nuevas obras, aseguraremos que éstas se puedan realizar con todas las garantías que requiere el caso. Si es necesario, exigiremos a Adif que realice nuevos estudios. Hasta ahora ha actuado siempre en lo que se le ha pedido. Cuando se ha detectado una grieta han respondido inmediatamente. No estamos en una situación de peligro y no se va a hacer nada que pueda resultar peligroso", insistió Alegre.