Curiós títol per parlar de l'estació
(Suposo que en uns minuts ho arreglaran, però mireu a hores d'ara:
http://www.lavanguardia.es/ciudadanos/n ... arada.html
La tuneladora de las obras de la L9 estará seis meses parada 
Este verano se licitará la estructura de la estación por 426,8 millones | El coste total se estima en 703 millones, cien más de lo estimado hace medio año | Con o sin plusvalías de los edificios, la estación se acabará, asegura el ministro
ÓSCAR MUÑOZ | Madrid | 22/05/2009 | Actualizada a las 03:31h | Ciudadanos
La que está llamada a ser la gran terminal de la alta velocidad del norte de Barcelona, la macroestación de la Sagrera, está a punto de dar un acelerón. El proyecto, que se había encallado por no tener asegurada su financiación -en buena parte dependiente de las plusvalías urbanísticas, que hoy por hoy son una quimera- pasará de los despachos al tajo a finales de año. Y para ello, este verano se licitará la primera fase de las obras por 426,8 millones de euros. Este es uno de los puntos del pacto que Fomento, la Generalitat y el Ayuntamiento han cerrado y que fija cómo se pagará esta infraestructura, valorada según la última actualización en 703 millones de euros, un centenar más de millones de los estimados hace tan solo medio año.
El acuerdo, alcanzado después de unas complejas negociaciones a tres bandas, fue presentado ayer en Madrid por el ministro José Blanco, el conseller de Política Territorial i Obres Públiques, Joaquim Nadal, y el alcalde Jordi Hereu. Tal como se dio a conocer esta misma semana (véase 'La Vanguardia' de anteayer), el grueso de la inversión la asumirá Fomento. La previsión inicial era que ministerio aportara el 38% del conjunto de la actuación y el 62% restante quedara en manos de los aprovechamientos de la edificación. El pinchazo de la burbuja inmobiliaria ha obligado a recabar más fondos públicos. Sólo así puede garantizarse el arranque de la obra. El ministro de Fomento argumentó ayer que lo fijado en el convenio que suscribieron las tres administraciones en el 2002 ya no sirve. "Los instrumentos y la valoración de entonces han quedado desfasados", manifestó, y si hoy se mantuviesen "resultaría inviable la ejecución de las obras". Así, la revisión acordada ayer rebaja la parte procedente de las plusvalías a un 40,8% de modo que el Gobierno asume el otro 59,2%.
El desglose de los 703 millones que costará la estación queda del siguiente modo: 161 millones de euros los pondrá el ente ministerial Adif; 255 millones los asumirá el Estado a cargo de las inversiones que destina a Catalunya en infraestructuras (computables por la vía de la disposición adicional tercera del Estatut a razón de 51 millones cada año hasta el 2013); y 287 millones procederán de la venta de los espacios edificables, cuando el mercado asegure su rentabilidad. Los dos primeros capítulos aseguran la primera fase de las obras (la estructura de la estación) y el último su finalización (la arquitectura interior, los acabados y las instalaciones). Lo que está claro es que cuando los trenes veloces pasen por el corredor de la Sagrera, a partir del 2012, no pararán en la estación porque seguirá en obras. Y así ocurrirá al menos durante un par de años.
El pacto, que debe ser ahora ratificado por la comisión bilateral Estado-Generalitat, es bueno, coincidieron el ministro, el conseller y el alcalde, porque a su juicio despeja todas las dudas que había sobre el futuro de la estación. "Es un acuerdo muy importante para el conjunto de las infraestructuras de Catalunya y para la continuidad de las obras de la alta velocidad y más ahora, en un contexto de crisis que requiere de inversiones de este tipo", destacó Nadal. "No vamos a perder ni un solo instante en iniciar esta estación", enfatizó Blanco, quien reiteró su "compromiso" con Catalunya, tras lo cual destacó que "la mejor manera de conseguir las infraestructuras que se necesitan es desde la concertación entre las administraciones y no con el enfrentamiento".
Pero si ayer había alguien satisfecho, ese era, sin lugar a dudas, Jordi Hereu. El alcalde se mostró convencido de que el de la Sagrera, un proyecto clave para el desarrollo de los barrios del norte de la ciudad, da un paso de gigante que ya no tiene vuelta atrás. "Hoy es un día trascendental -manifestó- hace veinte años que Barcelona soñaba con la Sagrera y hoy empieza a ser realidad". Hereu celebró que el propio ministro de Fomento hiciera suyo el discurso del Ayuntamiento en favor de esta obra, tanto por lo que va a representar desde el punto de vista ferroviario como para el conjunto de Barcelona. Blanco, además de detallar la funcionalidad que va a tener la nueva terminal en el esquema de transporte, abundó en lo que va a suponer desde el punto de vista urbanístico. Y puso como ejemplo lo que, a su entender, es "lo más espectacular" del proyecto: "La gran cubierta sobre el conjunto, que iluminará la estación con luz natural y aportará una gran superficie para el uso público".
El paquete de actuaciones que se licitarán este verano incluye, por un lado, la primera fase de las obras, las de la estructura de la estación, valoradas en 426,8 millones de euros. De esta cantidad, 28 millones corresponden a la terminal de autobuses subterránea. Como Adif ha refundido el proyecto de esta actuación básica de la estación con la de los accesos, estos últimos también se van a licitar este verano, por un valor adicional de 211,4 millones de euros. Esta cantidad no se incluye en los 703 millones que cuesta la terminal y servirán para construir la plataforma ferroviaria de alta velocidad entre el final del túnel del Eixample, en Bac de Roda, y la estación, de 400 metros de longitud, además de la cobertura de las líneas de ancho internacional e ibérico y del viario urbano asociado al proyecto.
Blanco insistió en que la construcción de la Sagrera "está garantizada". Que los 287 millones de euros previstos para acabar la estación se aparquen y se prevean obtener más adelante con los rendimientos de la edificación no debe preocupar, según el titular de Fomento. Este cálculo está hecho a partir de los indicadores de recuperación de la crisis con los que trabaja el Gobierno -"hemos tocado fondo", subrayó el ministro- pero si en el plazo de un año y medio o dos años "la situación es distinta, se articularán mecanismos para que la obra no sufra retrasos". El conseller Nadal dejó abierta la posibilidad de que el consorcio Barcelona Sagrera Alta Velocitat, participado por las tres administraciones, se endeude poniendo los terrenos edificables como garantía.
Tampoco va a ser un problema que 255 millones se computen como inversiones para infraestructuras en cumplimiento de la disposición adicional tercera del Estatut, según Nadal porque, aclaró, todas las aportaciones que hace el Estado en esta materia se hacen por esta vía. En cualquier caso, aseguró el conseller, que la Sagrera se quede con una parte de este pastel mayor de la pensada inicialmente "no va a ir en detrimento de inversiones previstas en otros lugares de Catalunya".
El desbloqueo de la Sagrera es fundamental porque, como recordó Jordi Hereu, supone mucho más que una estación. La infraestructura ferroviaria es clave para descongestionar Sants. El objetivo es contar con dos grandes terminales conectadas con el resto de la red de transporte ferroviario (cercanías y metro), además de los autobuses, que optimice el funcionamiento del sistema en su conjunto. Pero, más allá de este objetivo, esta instalación, que se espera tenga cerca de cien millones de viajeros al año, es el motor de un proyecto urbanístico de proporciones gigantescas que persigue coser los barrios del norte de Barcelona y crear un nuevo centro de atracción de ámbito metropolitano e incluso catalán.
La operación abarca una franja de cuatro kilómetros de longitud desde el puente de Bac de Roda hasta el nudo de la Trinitat por la que discurre el corredor ferroviario Barcelona-Girona y que es una cicatriz que separa los barrios de esta zona de la ciudad. La cobertura de las vías permitirá crear un parque de 45 hectáreas y, en los márgenes, nuevas áreas residenciales y de actividades terciariasque, según los planes iniciales, debían contribuir con las plusvalías generadas -gran parte de los terrenos son públicos- a la financiación de las actuaciones previstas, entre ellas la propia estación. Quedan por construir unas 10.000 viviendas, que suman 762.000 m2de techo, 367.000 m2 de comercios y oficinas, 55.000 de hoteles y 10.000 de edificaciones administrativas, desplegados en nueve sectores. Uno de estos sectores es el vinculado directamente a la estación, con un techo total sobre las instalaciones ferroviarias de 180.000 m2(150.000 de oficinas y comercios y 30.000 de hoteles).
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